5 de septiembre de 2011

La luz del valle

 amanecer desde Hoz de Jaca



Dicen que la magia de un lugar como el Valle de Tena no se termina de comprender hasta que convives con él. Tras 15 días en Búbal como participante en el Programa de Recuperación de Pueblos Abandonados, puedo decir que, en parte, he empezado a descubrir esa magia, esa luz del valle.

Historias de brujería en el Betato, baños en el barranco de Gorgol, pateadas por el Camino Candón o marchas a la luz de un frontal para ver amanecer con una perspectiva perfecta de la rojiza Partacua. Verdaderos momentos de simbiosis con la naturaleza en el Boyeral y momentos emotivos con los antiguos vecinos de Polituara. No sé si será la luz del valle la que me ha afectado, pero no soy la misma persona que entró 15 días antes en este antiguo pueblo. Gracias, Búbal.


 Peña Blanca, siempre presente

 increíble atardecer sobre el pantano de Búbal

 Hayedo del Betato, brujería y naturaleza por partida doble

La Tierra de Biescas se abre tras Santa Elena

 entrada a Búbal

camino de Piedrafita

Piedrafita de Jaca

Increíble Búbal

No hay comentarios:

Publicar un comentario