This is my winter

amanece: -10ºC, silencio total y Oroel de fondo

Hoy, día en blanco. Los estudios ganan la partida por primera vez esta temporada y toca quedarse en casa preparando exámenes. Momento de respiro tras más de 3h rodeado de apuntes de filosofía.

Ayer, sin embargo, buen día de esquí. Frío intenso y ráfagas de viento importantes. Sensaciones térmicas cercanas a los -35ºC...pero hay que dar el quite, y nadie me quitó mis 5 horitas de esquí. Unos buenos guantes, unas mallas térmicas y a disfrutar de las buenas condiciones pisteras.

Porque lo que es fuera, nada. Parece mentira que hace tan sólo 7 días estuvimos sumergiéndonos en medio metro de nieve recién caída. Eolo ha hecho de las suyas y ha pelado todo el valle. Crestas marrones y caras expuestas en proceso de cambiar de color. Daba pena mirar hacia Tendeñera y verlo tan pelado.

Pero es lo que hay, este año las cosas no salen y hay que aceptarlo. Ya vendrá otro año mucho mejor, seguro. De todas maneras, algo se pudo hacer ayer. Junto con un compañero del Tambalea team, y gran amigo, David, sacamos algo de petróleo.

No photos, no video. Solo esquiar, y disfrutar de ello. Como dijo nuestro amigo Ricardo, día de bajadas trabajadas! Debido al viento, nieve cambiante continuamente. Pasas de venteada a costra o hielo en tan solo dos metros. Surtido pirenaico del bueno. Día perfecto para ejercitar la mente, pensar dónde dar los giros y cómo darlos. Y lo disfrutamos, joder que si lo disfrutamos.

Zonas realmente heladas que nos hicieron recordar el peliculón de Xavier de Le Rue, This is my winter.

En definitiva, otro día en el que vuelvo con una gran sonrisa de oreja a oreja. Cada vez me gusta más estar aquí arriba.

Y es que con amaneceres como el de hoy merece la pena estar aquí para vivirlo. Mientras el resto subía camino de la estación, yo me he quedado viendo amanecer. -10ºC, silencio total y el fondo de siempre. Han sido 10 minutos de mucho frío, pero que han cargado las pilas para toda la semana que viene.

This is my winter.